Francisco Javier Martín, Director General de Vivienda y Suelo (MITMA) ha participado en el encuentro sobre “Retos y Oportunidades de la Nueva Ley de Vivienda” organizado por la Asociación de Gestores de Vivienda
La AGV ha señalado dentro de este encuentro que la vivienda asequible en propiedad es la gran olvidada en la nueva ley de vivienda
En el día de ayer tuvo lugar el encuentro telemático “Retos y oportunidades de la Nueva ley de Vivienda”, organizado por la Asociación de Gestores de Vivienda (AGV) y lamadredelascooperativas, con la participación de Francisco Javier Martín, Director General de Vivienda y Suelo del MITMA, quien ha centrado su participación en dos aspectos: la rehabilitación residencial y la producción de vivienda asequible, destacando que el éxito en estas dos líneas de actuación tan fundamentales va aparejado al desarrollo de la colaboración público-privada.
La vivienda asequible es el unicornio buscado por compradores, administración y promotores en los últimos años, especialmente en zonas con escasez de vivienda pública. Uno de los objetivos que se marca la recién aprobada Ley por el derecho a la Vivienda es hacer accesible la vivienda a personas con menos recursos. Para ello van a destinarse 1.000 millones de euros a la producción de vivienda asequible, en la que además pueda incidirse en su sostenibilidad, eficiencia energética y la digitalización, en una mejora global de su dignidad y calidad, entre otras cuestiones.
Junto a la producción de vivienda asequible, la rehabilitación residencial es el plan maestro del Ministerio de Fomento, diseñado ambiciosamente de modo que los fondos europeos puedan repecutir en la mejora de cada hogar, repartidos con la ecuanimidad de referirse a la mejora de calidad y energía de cada edificio de este país. Es un plan a largo plazo, que pretende intervenir en millones de hogares y que requiere particular atención por parte del sector inmobiliario.
3.400 millones de euros irán dirigidos a rehabilitación residencial. Para incentivar estos procesos de rehabilitación se han establecidos deducciones fiscales y ayudas directas que junto con las posibilidades de financiación bancaria darán mucho dinamismo a la actividad rehabilitadora y nos posibilitarán alcanzar los objetivos marcados en cuanto al aprovechamiento de los fondos Next Generation y al cambio y mejora de nuestro parque inmobiliario. El ministerio ultima la territorialización del plan, con la participación cercana de Comunidades autónoma y ayuntamientos y el diseño instrumental de las ayudas, sobre la base de que quien apueste por una rehabilitación más sostenible y eficiente, mayor deducción obtendrá.
Igualmente, Francisco Javier Martín destacó la figura del Agente Rehabilitador y lanzó a los más de 50 participantes, el reto de que dieran el paso de abrir una nueva línea de negocio dentro de sus empresas gestoras de cooperativas:
“Un gestor de cooperativas por su trayectoria y experiencia, ya está habituado a enfrentarse a la toma de decisiones y asesorar en la construcción de las viviendas, por lo tanto, tiene el mecanismo perfecto para poder trasladarlo al sector de la rehabilitación residencial.
Ofrece una nueva perspectiva de trabajo al sector de la gestión de las cooperativas y abre un nuevo escenario: la construcción, producción o gestión de la vivienda no se queda ahí, sino que es un proceso que va más allá y que necesitará intervenciones administrativas, gestiones, mantenimiento y rehabilitaciones a lo largo del tiempo”.
Por su parte los miembros de AGV pusieron el acento y trasladaron al Director General de Vivienda y Suelo que la vivienda asequible en propiedad es la gran olvidada de la nueva Ley de Vivienda, además de su preocupación por los problemas más acuciantes que inciden en el desarrollo de estos planes: la falta de mano de obra en el sector de la construcción, en donde se solicitó al Director General que se ponga en marcha un plan de formación y sensibilización para fomentar el interés de nuestros jóvenes por trabajar en el ámbito de la construcción y promoción de viviendas. Las dificultades de desarrollo de la vivienda protegida por la obsolescencia de los módulos, sin actualizar desde el 2008, así como la necesidad de colaboración con las entidades financieras fueron las últimas ideas que precedieron al ofrecimiento de una colaboración con el Ministerio a través del Consejo Asesor de Vivienda que se establecerá en breve.